lunes, 29 de enero de 2018



A tres mil ciento cincuenta y dos metros de altura y aun así no logro ver el sitio donde nací. Todo es tan distinto. Solo puedo ver un gran ocaso y un par de ojos azules que me guían hacia donde debo ir. Caigo en cuenta de lo lejos que he llegado y lo que me ha costado. Lo que he reído y he llorado. Lo que he sufrido y he disfrutado. Lo que he crecido. Caigo en cuenta de que no sé cómo, ni por cuanto tiempo, pero por ahora, mi hogar eres tú. Hasta que me toque recoger mis maletas y seguir, o hasta que la mente me gane esta pelea.  Fría aunque te toque el sol, atenta aunque de momentos apática. En un segundo te quiero, y al siguiente quiero huir de ti. Por un momento me creo que ya conozco las calles de tu laberinto, y al siguiente caigo en cuenta que aún queda mucho por recorrer. No hay similitud en nosotros y eso me dificulta todo, pero hoy, es aquí junto a ti donde quiero estar.

Guíame.

"It is not the strongest of the species that survives, but the one most adaptable to change."

No hay comentarios:

Publicar un comentario